La gente, en general, suele reservar el cava para momentos muy señalados: aniversarios, festejos y épocas "ad-hoc" como la Navidad; pero yo he superado esa costumbre limitativa y la he ampliado a un uso mucho más libre, constante y casual.
El cava, por decirlo en términos sencillos y sin que se sientan ofendidos los énólogos ortodoxos, es básicamente una variedad de vino blanco elaborado con el método "champenoise" que le confiere la "textura" espumosa elaborado específicamente en la región catalana de Sant Sadurní de Anoia. Es por lo tanto un vino blanco espumoso tipo "champaña" que cuenta con Denominación de origen controlada, tal y como sucede con el famoso caldo francés, por lo tanto no puede haber champagnes españoles como tampoco puede haber cavas alemanes, rusos o japoneses: sólo puede haber Cavas españoles.
A veces me da rabia escuchar como incluso españoles de toda la vida piden o hablan del Cava refiriendose a él como champagne sin darse cuenta de que se cae en un error, sabiendo que se trata de un vino español y que tiene su nombre propio.
En fin, dejando a un lado tales resquemores, quería abordar el tema del Cava porque me imagino que ayer en en España se debieron abrir muchos miles de botellas de tan delicioso vino con motivo de la navidad.
Ya decía yo que en mi caso personal no limito el consumo del cava a este tipo de pretextos, sino que desde hace tiempo cada vez que puedo disfruto de una copa fresca de ese vino burbujeante.
Recuerdo que desde que efectué mis primeros vuelos en Iberia para venir a España, en lugar de pedir vino tino, vino blanco, cerveza o cocacolas como la gran mayoría de los pasajeros para acompañar los alimentos, yo me pedía mi "benjamín" de Cava (botellín que no llega a los 200 ml.) que me venía de perlas para irme "aclimatando" para mi viaje trasatlántico.
Como me parece que practicamente yo era el único que consumía Cava en esos vuelos, siempre contaba con la invaluable complicidad de la azafata de turno que me suministraba mis benjamines durante el largo y sinuoso trayecto (sonó como a cancion de Los Beatles ¿no?)
En México no celebramos la navidad con cava, sino más bien con ponche, ese maravillosa bebida "levantamuertos" a la que se le pone su "piquete" de alcohol para que salga mas rico.
Como en España tenemos problemas para adquirir tejocotes (yo de hecho no tengo noticia de que alguien aqui en España las haya visto en alguna tienda o mercado) pues no me he animado a hacerlo. Sé de algunas buenas cocineras que los han sustituído con membrillos o manzanas ácidas pero no me ha tocado probar tales versiones.
En fin, que yo ayer celebré la navidad bebiendo una botella de mi cava favorito: el de Celler Vell y una de las copas me le bebí a la salud de todos mis lectores de este blog que aunque son pocos creo que son muy selectos.
Sean muy felices por favor.
Querido compadre, no podría estar más de acuerdo contigo con el tema del cava o champagne, que a mí me gustan ambos y no me siento yo especialmente nacionalista al respecto ;)
Pero es cierto que es una bebida fantástica que no debería dejarse sólo para momentos especiales.
De hecho ayer noche, durante la cena yo bebía exclusivamente cava de principio a fin de la noche, y hoy me siento como una rosa :)
Besos y espero que Santa se haya portado bien por ahi ;)
Esto, que supongo que lo has deducido, pero por si acaso, el comentario anterior es mío, de tu comadre favorita ;)
Sonia Blanco
Comadre:
Nunca tuve ninguna duda de que la autora del post hubieras sido tu. Ya lo dije en la parte final del mensaje: "los lectores de este weblog serán pocos pero eso sí: muy selectos"
Acerca del Cava: ya tenemos otro punto de coincidencia que se suma a la lista importante de afinidades que nos une desde hace ya algunos años.
Ahora no sólo tenemos pendiente una queimada sino tambien una botella de Cava que yo, desde ya, pongo a tu disposición.
Besos
Pues cuando tú quieras, ni que decir tiene que pongo a tu diposición mi pote gallego y una buena botella de orujo, y piensa que el nuevo año es una buena ocasión para ahuyentar malas vibraciones y hacer el "conxuro" ;)
Besotes.
Sonia B.
Feliz navidad y deseos de un excelente 2005!
Pues por acá el ponche estuvo muy rico, aunque personalmente no me importaria que faltara el tejocote, mi ingrediente preferido será siempre la cañita de azúcar(hace la vida más dulce)
Para antojarte como ya es mi costumbre te diré que el menú de año nuevo en casa de mi tía (donde la familia pasa el 31) será el clásico bacalao a la vizcaina, con romeritos con mole, además del pavo y el jamón horneado.
Quien quita y pierdes peso por la ausencia de tanta cosa antojadiza y alta en calorías, hay que ver el lado bueno :)
Estimada Azul:
No sabes la revolución de jugos gástricos que has producido mientras leía el mensaje que amablemente me has escrito.
Hiciste que me trasladara a unos años atrás cuando en México cenabamos para las navidades el mismo menu (bacalao, romeritos, pavo y jamón asado).
Luego, nos la pasabamos casi dos semanas comiendo "recalentado" hasta que nos acabábamos las provisiones de comida. Vamos, para mi una escena clásica de post navidad era hacerse una torta de bacalao (bocata para que me entiendan los españoles que me leen) o una de jamon asado con puré de manzana.
Esta navidad, precisamente, cociné una buena cantidad de "Bacalao a la Brondo" que debe ser muy similar al que comes tu, con lo que me aseguré tener algunas dosis de relleno para hacer tortas, pero desde luego que eché en falta un buen plato de romeritos, que desgraciadamente no podemos hacer aqui porque no se consigue el ingrediente principal.
Asi es que nada Azul, buen provecho, que lo disfrutes y sólo te pido que cuando le des un bocado a tu plato de romeritos te acuerdes de una amigo mexicano que tienes en España y te lo comas a mi salud.
Felicidades para este año nuevo que está a punto de comenzar